Desafortunadamente estos ambientes han conducido a rupturas familiares, intentos de suicidio, infidelidades, conflictos intrafamiliares, adicciones, fracasos matrimoniales, apegos y codependencias.

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Para Baars y Terruwe la negación es todo lo opuesto de la afirmación. Uno niega al otro recordándole innecesariamente lo malo que hay en él a través de críticas destructivas, o al darle consejos prematuros sin haberlo escuchado antes.

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Uno niega al otro cuando no lo perdona por ser otro. Uno niega a una mujer al aconsejarle abortar cuando ella no desea tener el hijo porque es demasiado inmadura para amarlo y afirmarlo.

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Uno niega a otra persona aconsejándole que ignore una norma o ley en un área que es particularmente difícil para ella.

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Pensamos que una forma de negación tiene que ver con los supuestos que se manejan alrededor de las percepciones del carácter, principalmente a partir de hechos y circunstancias que ocurren frecuentemente y se han aceptado de manera tácita o explícita, convirtiéndose  en esquemas "normales" de relación interpersonal, sin ser transformados ni entendidos por sus protagonistas.